Durante su intervención en la reciente Cumbre de Emergencia sobre Palestina, el presidente Gustavo Petro cuestionó fuertemente al mandatario estadounidense Donald Trump por su falta de respuesta a una solicitud oficial de reunión con los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), organismo que actualmente preside.

“He pedido una reunión con Estados Unidos y no he recibido ni siquiera respuesta escrita. No quieren reunirse con América Latina y el Caribe porque saben que reuniéndose con cada uno por separado son más fuertes”, afirmó Petro, al denunciar una estrategia deliberada de aislamiento frente a los países del sur. Según él, Washington prefiere dividir para negociar en condiciones más favorables.

El mandatario también lanzó críticas más amplias a la política exterior de EE.UU., particularmente su enfoque hacia la región. “No dialogan, sino que amenazan, como ya nos sucede a nosotros”, dijo, en alusión a lo que considera una actitud recurrente del gobierno norteamericano frente a gobiernos latinoamericanos que plantean posiciones independientes.

En otro momento de su intervención, Petro se refirió a la situación de los migrantes suramericanos en Estados Unidos, y afirmó que muchos son tratados “como esclavos”, señalando incluso la muerte de una mujer colombiana en medio de un operativo migratorio. “Nos persiguen en las calles de Nueva York, nos encadenan en los aviones. Se creen una raza superior. Eso solo se lo creía Hitler, y hay que cambiar eso”, expresó.

El presidente colombiano también ironizó con la posibilidad de trasladar la Estatua de la Libertad de Nueva York a Cartagena, asegurando que “fueron los negros quienes lucharon por la libertad”.

Estas declaraciones llegan días después de haberse superado una reciente crisis diplomática entre Colombia y Estados Unidos, y vuelven a tensar el discurso entre ambas naciones, en un contexto donde Petro busca posicionar a América Latina como un bloque más cohesionado frente a las potencias.