El director de la UNGRD, Carlos Carrillo, enfrentó este miércoles una nueva controversia luego de responder a los señalamientos de la directora del Dapre, Angie Rodríguez, sobre presuntas irregularidades durante su gestión en el Fondo de Adaptación. En medio de su defensa, Carrillo terminó salpicando al ministro del Interior, Armando Benedetti, a quien vinculó con supuestos intereses políticos detrás de varios contratos de la entidad.

La tensión estalló después de que Rodríguez afirmara que durante la administración de Carrillo hubo una ejecución mínima en proyectos clave del Fondo, pese al aumento en la contratación de personal. “Encontramos que hay un incremento a partir del año 2018 de las personas contratadas. Entonces, entre más personas contratadas, hay menor ejecución de los proyectos”, aseguró la funcionaria.

Carrillo rechazó de inmediato las acusaciones y afirmó que la información presentada por el Dapre proviene de “la mano derecha de Katherin Rojas”, quien, según dijo, llegó al Fondo con el respaldo de Benedetti. “Duró un mes en la gerencia y la denuncié por politiquear en el Fondo. Rojas volvió a acercar la entidad a grupos políticos en abierta contravía a las órdenes del Presidente”, escribió en X.

El director de la UNGRD fue más lejos durante una rueda de prensa, al señalar que recibió una denuncia que advertía que el contrato de la Ruta del Arroz habría terminado favoreciendo directamente a la llamada ‘Ñoñomanía’, grupo político que, según él, mantiene cercanía con Benedetti. “Los Ñoños han sido, son y serán socios políticos de Armando Benedetti”, afirmó.

Carrillo también mencionó que Benedetti tendría antecedentes en procesos complicados como el caso Fonade, y aseguró que no había querido confrontarlo por temor a represalias. “Todo el que pelea con Benedetti sale del Gobierno. Es una persona muy poderosa, pero no me quedaré callado”, sostuvo.

Frente a las críticas sobre la baja ejecución en su administración, Carrillo insistió en que su informe de gestión nunca recibió objeciones de la gerencia entrante. Además, denunció que el Fondo de Adaptación “se volvió un fortín de los politiqueros”, lo que, a su juicio, explica parte de las presiones y disputas internas. “Estas intrigas palaciegas desgastan al Gobierno y me hacen perder tiempo valioso”, añadió.

La controversia estalla en un momento de alta sensibilidad política para el Ejecutivo, especialmente porque los señalamientos de Carrillo se producen el mismo día en que Benedetti sostuvo un enfrentamiento público con el exministro de Vivienda, Luis Felipe Henao, por otros supuestos hechos de corrupción.

La disputa deja una nueva grieta dentro del Gobierno y un capítulo abierto sobre el manejo del Fondo de Adaptación, mientras el Ejecutivo intenta contener el impacto político de las acusaciones cruzadas.