El ministro del Interior, Armando Benedetti, habita desde hace dos meses una lujosa mansión en Puerto Colombia (Atlántico) que anteriormente perteneció al empresario venezolano Álex Saab, señalado como testaferro de Nicolás Maduro. La residencia fue adquirida mediante un leasing habitacional con el banco Colpatria, que le permite pagar cuotas mensuales con opción de compra.

La casa está ubicada en la urbanización Lagos de Cajuaral, donde los valores de las propiedades oscilan entre 2.500 y 15.000 millones de pesos. Según información del periodista Daniel Coronell y del abogado Camilo Enciso, el inmueble cuenta con cuatro habitaciones, estudio, sala, comedor, piscina y varios garajes, suficientes para la escolta del ministro.

El contrato de leasing indica que Benedetti paga más de 20 millones de pesos mensuales, cifra significativa frente a su ingreso oficial de 26,8 millones de pesos al mes, compuesto por su asignación básica, gastos de representación y prima de dirección.

Contraste con declaraciones de quiebra

El hallazgo genera cuestionamientos sobre las finanzas personales del ministro, quien había declarado ante la Corte Suprema de Justicia estar en la quiebra:

“Tengo casa, pero no tengo casa; tengo apartamento, no tengo apartamento; tengo deuda, pero no la tengo y yo estoy completamente en la quiebra”.

En su informe patrimonial de febrero de 2025, Benedetti reportó 13 millones de pesos en cuentas y deudas por 923 millones, mientras que su esposa declaró ingresos de apenas 300.000 pesos en 2024. Pese a esto, actualmente mantiene dos viviendas: la mansión de Puerto Colombia y un apartamento en Bogotá.

Contexto adicional

El inmueble fue entregado por Álex Saab a Colpatria como dación en pago en 2011. Posteriormente, el empresario de espectáculos Ricardo Leyva ocupó la casa y cedió el contrato a Benedetti hace cerca de dos meses.

La situación se complica por la reciente inclusión de Benedetti en la Lista Clinton (OFAC), junto al presidente Gustavo Petro, Verónica Alcocer y Nicolás Petro. Esta designación restringe operaciones financieras internacionales, por lo que el banco tendría que revisar o incluso suspender su relación contractual con el ministro.

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No es la primera propiedad que Benedetti adquiere en el Atlántico. En 2023 compró otra casa en Pradomar, con dinero prestado por su aliado político Euclides Torres, contratista que recibió un contrato por 95.000 millones de pesos del actual Gobierno.

El ministro respondió a las revelaciones a través de su cuenta de X. “He rendido todas las explicaciones ante la Corte Suprema por 23 años y no ante ‘periodistas’ amarillistas… Es de cobardes atacar cuando uno está en el piso, pero… no siempre son tan hombres”.