El presidente Gustavo Petro protagonizó una escena inédita en la política colombiana, despidió en directo al viceministro de Agua y Saneamiento Básico, Edward Steven Libreros, durante el Consejo de Ministros transmitido por televisión.

“Usted está atravesado en que se expida el nuevo régimen tarifario de aseo y se acabó, no va más, hermano. Este Gobierno no vino a obedecerle a los gremios”, dijo el mandatario ante el gabinete completo y las cámaras del Canal Institucional.

La abrupta decisión evidenció las tensiones internas que atraviesa el Gobierno en torno a la política de servicios públicos y la influencia de los gremios en la definición de tarifas.

El episodio estalló cuando Petro cuestionó el retraso en la expedición del nuevo régimen tarifario de aseo, una de las apuestas centrales de su programa Basura Cero, que busca beneficiar a recicladores y usuarios de bajos ingresos.

“El viceministro de Agua le cree más a Andesco que a nuestro proyecto. Por eso es que el acueducto Cereté–Ciénaga de Oro no está hecho”, señaló Petro, en alusión a la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Públicos y Comunicaciones (Andesco).

Según el mandatario, Libreros habría priorizado los intereses de ese gremio privado por encima de las directrices del Ejecutivo. La Comisión de Regulación de Aseo (CRA) aún tiene en discusión pública el nuevo marco, que debería entrar en vigencia en 2026.

Choque con la ministra de Vivienda

La tensión se extendió al Ministerio de Vivienda, liderado por Helga Rivas, quien fue interpelada por el presidente por el supuesto estancamiento de proyectos de acueducto en Córdoba y por mantener una “visión tecnocrática” en la asignación de recursos.

Petro criticó lo que llamó la “repartija politiquera” de obras de agua potable, cuestionando cómo históricamente se han priorizado proyectos con fines electorales. Rivas, por su parte, defendió su gestión señalando que hay 44 proyectos en curso y 2,2 billones de pesos comprometidos en vigencias futuras.

Sin embargo, también aprovechó el momento para enviar una indirecta al presidente, “Me alegra que lo ponga porque firmamos un Conpes para unos aviones de guerra y a mí me dolió firmar ese Conpes. Creo que la prioridad es el agua”, dijo la ministra, en referencia al plan de adquisición de aviones Gripen por $17 billones.