El presidente Gustavo Petro anunció una transformación en la Policía Nacional, que comenzará con el relevo del director, el brigadier general Carlos Fernando Triana. Según el mandatario, aunque Triana ha hecho un “gran trabajo”, existen fallas que requieren ser superadas en profundidad.

Petro vinculó la decisión a diversos hechos recientes que, según él, evidencian deficiencias institucionales. Entre ellos mencionó el ataque en Amalfi, Antioquia, donde murieron 12 uniformados, y los incidentes durante la marcha pro-palestina en Medellín.

El presidente subrayó la importancia de recibir informes detallados antes de tomar decisiones finales sobre la Policía de Medellín, destacando que “no puede existir parapolicía” en la ciudad, en referencia a estructuras paralelas dentro de las fuerzas de seguridad.

Enfoque hacia la cooperación internacional

Durante su alocución, Petro también abordó la coordinación regional contra el crimen organizado y el narcotráfico. Destacó la necesidad de integrar la inteligencia de Colombia, Venezuela y Ecuador, así como fortalecer el trabajo conjunto entre las fuerzas públicas de la región para desarticular redes criminales que operan transnacionalmente.

El presidente se refirió además a la reciente descertificación de Colombia por parte de Estados Unidos, calificándola de “injusta” y sin fundamento. Según Petro, la medida representa una “trampa y calumnia” que afecta la imagen del país en el escenario internacional, aunque aseguró que su administración continuará fortaleciendo la Policía bajo un enfoque diferente.

El mandatario enfatizó que los cambios no se limitarán a la salida del director Triana, sino que formarán parte de una transformación más amplia de la institución. “A ciegas no vamos a tener una política eficaz, por eso he ordenado cambios”, concluyó Petro, destacando la necesidad de ajustar procesos y garantizar el control institucional en todas las regiones del país.