El ministro del Interior, Armando Benedetti, protagonizó este viernes un nuevo choque institucional al acusar al presidente de la Corte Constitucional, Jorge Enrique Ibáñez, de intentar dar un “golpe de Estado”, luego de conocerse la ponencia del magistrado que propone declarar inconstitucional la reforma pensional impulsada por el Gobierno Petro.

“¡Golpe de Estado! Resulta que ahora el líder de la oposición, ‘magistrado Ibáñez’, sabe más de la Ley Quinta que quien fue más de una década secretario general del Congreso, Gregorio Eljach, hoy procurador. ¡Hasta pasa por encima del Congreso!”, escribió Benedetti en su cuenta de X, desatando una ola de reacciones políticas y jurídicas.

La fuerte declaración se produjo tras la filtración de la ponencia de Ibáñez, en la que plantea que la Cámara de Representantes no corrigió los vicios de trámite detectados por la Corte en junio pasado, durante las sesiones extraordinarias del 27 y 28 de ese mes. Según el documento, los errores legislativos afectarían la validez completa del proyecto, lo que llevaría a que la reforma sea anulada y el Gobierno deba volver a radicarla desde cero.

Ibáñez sustenta su postura en presuntas irregularidades como la convocatoria a sesiones con apenas cinco horas de anticipación, la falta de quórum decisorio para aprobar el orden del día y la omisión del debate integral del articulado, que había sido exigido por el Auto 841 de la Corte Constitucional. En la ponencia, el magistrado señala que la plenaria “votó expresamente no continuar con la discusión del articulado”, lo que constituye, según él, un incumplimiento deliberado de la orden judicial.

El magistrado también advirtió que permitir la aprobación de una reforma con quórum incompleto o sin debate real “equivale a aceptar que una minoría imponga su voluntad sobre la representación nacional”, en una referencia al principio democrático que debe regir las decisiones legislativas.

Benedetti, por su parte, consideró que el magistrado está actuando con sesgo político y recordó que los mismos argumentos ya habían sido desestimados en otras leyes aprobadas bajo condiciones similares, como el Plan Nacional de Desarrollo y la Ley de Jurisdicción Agraria. Según el ministro, Ibáñez estaría “repitiendo el libreto de la oposición” y “pasando por encima de la voluntad del Congreso”.

El enfrentamiento entre Benedetti e Ibáñez no es nuevo. Semanas atrás, el ministro ya había acusado al magistrado de “acoso institucional” luego de que este solicitara a la Cámara de Representantes certificaciones de viajes del presidente Petro y documentos administrativos para verificar la legalidad de la convocatoria a sesiones extraordinarias.

La Sala Plena de la Corte Constitucional deberá decidir en los próximos días si acoge o no la ponencia de Ibáñez. De hacerlo, el Gobierno sufriría un duro revés legislativo, pues la reforma pensional es una de las piezas centrales de su agenda social.