El Juzgado Sexto Penal Municipal con Función de Control de Garantías de Barranquilla aplazó la audiencia de imputación y medida de aseguramiento contra Nicolás Petro, hijo del presidente Gustavo Petro. La decisión fue adoptada luego de que su abogado defensor, Alejandro Carranza, pidiera reprogramar la diligencia al no poder asistir por motivos profesionales.
Carranza explicó que debía participar en los alegatos finales de un caso en el Juzgado 36 Penal Municipal de Bogotá, en el que actúa como representante de la víctima —el propio presidente Petro—, además de tener compromisos personales y familiares previamente agendados.
La Fiscalía General de la Nación tenía previsto imputar a Nicolás Petro por los presuntos delitos de tráfico de influencias, interés indebido en la celebración de contratos y falsedad en documento público. Según las investigaciones, los hechos estarían relacionados con su paso por la Asamblea del Atlántico, donde habría favorecido a terceros a través de contratos de la Gobernación mediante la Fundación Consciencia Social.
La jueza Sofía Margarita Barros aceptó el aplazamiento, argumentando que el procesado tiene derecho a ser asistido por su abogado de confianza, por lo que no era posible continuar con la diligencia con un defensor público.
La nueva fecha fue fijada para después del 10 de noviembre, cuando se retomará la imputación.
El caso judicial contra Nicolás Petro avanza de forma paralela al proceso que investiga la supuesta financiación irregular de la campaña presidencial de su padre en 2022, y a un pliego de cargos formulado por la Procuraduría por presunto incremento injustificado de patrimonio durante su periodo como diputado.







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