La disputa entre el presidente Gustavo Petro y su excanciller Álvaro Leyva escaló con un nuevo intercambio de señalamientos. El mandatario, a través de un extenso mensaje en X, rechazó nuevamente las acusaciones que lo tildan de drogadicto y recordó episodios del pasado judicial de Leyva, a quien señaló de haber tenido vínculos con el cartel de Cali.

Álvaro Leyva ha insistido en que Petro presenta un deterioro en su salud física y mental que comprometería su capacidad para ejercer la jefatura del Estado. En declaraciones ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara, el excanciller relató episodios en ciudades como París y Santiago de Chile, donde, según su testimonio, el mandatario habría desaparecido de la agenda oficial por supuestos excesos con alcohol o drogas.

En sus cartas públicas, Leyva advirtió sobre lo que calificó como “una adicción” y anexó incluso una incapacidad psiquiátrica de 2019, además de solicitar pruebas médicas formales sobre la condición del presidente. El exministro ha reiterado que no se retractará de sus denuncias.

La respuesta del presidente

En un extenso mensaje publicado en su perfil de X, Petro rechazó las versiones de Leyva, quien en varias cartas y en su declaración ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes lo ha señalado de “drogadicto” e incapaz para ejercer la Presidencia.

El jefe de Estado negó haber estado en estado de embriaguez durante una cena en Santiago de Chile en 2024, como relató su exministro, y explicó que su condición médica —marcada por gastritis y cirugías previas— le impide ingerir licor en exceso. “Yo mismo no paso de una o dos copas de cerveza o vino, y nada más”, sostuvo Petro.

Asimismo, desestimó las insinuaciones sobre supuestas desapariciones en viajes internacionales, aclarando que su tiempo en Manta (Ecuador) fue dedicado a la escritura de un libro y no a reuniones clandestinas.

En su mensaje, el mandatario evocó antiguos señalamientos contra Leyva relacionados con el cartel de Cali. “El mismo Hidalgo, al que perdoné, con enorme error mío, de ser uno de los posibles sobornados del cartel de los Rodríguez, motivo por el que se exilió en Costa Rica, ahora quiere demostrar con solo el chisme que padezco de una drogadicción inhabilitadora”, expresó Petro.

Las menciones hacen referencia a los señalamientos de la década de 1990, cuando se acusó a Leyva de haber tenido acercamientos con los capos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela. Aunque nunca se emitió una condena en su contra, la controversia llevó al exministro a salir del país durante varios años.

Petro atribuyó los ataques de su exministro a un intento de desestabilización política, vinculado al caso de la licitación de pasaportes que le fue retirada a la empresa Thomas Gregg and Sons. Según el mandatario, ese fue el motivo real detrás de lo que calificó como un plan de Leyva para “tumbar al presidente”.

La controversia ahora se dirime en la Comisión de Acusaciones de la Cámara, que analiza las denuncias presentadas por Leyva y podría solicitar pruebas médicas adicionales. Mientras tanto, la confrontación entre dos figuras históricas de la política colombiana deja en el aire interrogantes sobre la estabilidad interna del Gobierno y la credibilidad de las instituciones.