El Senado de la República elegirá este miércoles, 3 de septiembre, al nuevo magistrado de la Corte Constitucional en reemplazo de José Fernando Reyes. La decisión enfrenta a dos nombres que concentran la atención: Carlos Camargo, exdefensor del Pueblo, y María Patricia Balanta, jurista vallecaucana respaldada por el Gobierno.

La votación se anticipa reñida y con alto impacto institucional, pues el elegido podría inclinar las mayorías en el alto tribunal. Analistas y dirigentes políticos advierten que de este resultado dependerán fallos sobre reformas estructurales, como la pensional, y otros debates de fondo en el país.

Camargo llega con el apoyo de Cambio Radical, el Centro Democrático, buena parte del Partido Conservador y un sector del Partido Liberal. Motoa, vocero de Cambio Radical, reiteró que el respaldo a Camargo busca “proteger la independencia de la Corte Constitucional” y evitar afinidades ideológicas con el Ejecutivo.

Balanta, por su parte, cuenta con el respaldo del presidente Gustavo Petro, quien pidió a su bancada votar por ella. Además, la candidata tendría el acompañamiento de la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, y de dirigentes del Partido de la U, colectividad que será determinante en la definición.

El debate ha estado acompañado de advertencias públicas. El exvicepresidente Germán Vargas Lleras calificó esta elección como “una de las mayores responsabilidades” en la historia del Senado y aseguró que el Ejecutivo busca mayorías en la Corte. Sus declaraciones fueron replicadas por líderes de oposición y compartidas por el expresidente Álvaro Uribe.

Otros juristas, como Ramiro Bejarano, cuestionaron la supuesta intervención de altos funcionarios en el proceso, mientras que el exministro Luis Felipe Henao alertó que lo que está en juego no es solo un reemplazo, sino la independencia del tribunal para la próxima década.

Antecedentes de votaciones cerradas

El antecedente más reciente fue la elección de Miguel Polo en noviembre de 2024, cuando superó a Claudia Dangond por apenas diez votos de diferencia. También se recuerda la votación de la consulta popular, negada en el Senado por un estrecho margen. Estos episodios refuerzan la expectativa de que la jornada de este miércoles concluya con un conteo muy ajustado.

La plenaria está citada a las 3 de la tarde y, de confirmarse un resultado apretado, el desenlace dependerá de los senadores independientes. Lo que se decida podría redefinir el equilibrio de poderes en Colombia durante los próximos años.