El Gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua negó la solicitud de extradición de Carlos Ramón González Merchán, exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) y exjefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DNI), requerido en Colombia por el escándalo de corrupción de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).

A través de una comunicación oficial enviada a la Cancillería en Bogotá, Nicaragua informó que González recibió asilo político bajo la Resolución Ministerial No. 001-2025, con fundamento en la Constitución de ese país y en convenios internacionales sobre derechos humanos y asilo.

“Se hace del conocimiento que Carlos Ramón González Merchán (…) le fue otorgado Asilo Político con base en la Constitución Política de la República de Nicaragua, convenios e instrumentos internacionales en materia de Derechos Humanos y de Asilo Político”, señala la carta.

La notificación llegó luego de que Colombia, mediante nota diplomática urgente, solicitara su extradición el fin de semana, con el argumento de que se cumplían todos los requisitos jurídicos.

Respuesta del Gobierno colombiano

El ministro del Interior, Armando Benedetti, calificó la decisión como “inamistosa y agresiva”.

“Si el presidente pide en extradición a alguien y ese país no corresponde, es un gesto inamistoso que no debe pasar”, afirmó el funcionario, en medio de la creciente tensión diplomática con Managua.

Carlos Ramón González, de 66 años, está prófugo desde noviembre de 2024 y tiene orden de captura del Tribunal Superior de Bogotá desde el 3 de julio de 2025. La Fiscalía lo acusa de cohecho, peculado y lavado de activos en el marco del desvío de recursos de la UNGRD, que incluía pagos ilícitos a congresistas y contratos irregulares como el de los carrotanques para La Guajira.

Excompañero de Gustavo Petro en el M-19 y antiguo dirigente de la Alianza Verde, González es señalado de coordinar el entramado de coimas a través de la exconsejera presidencial Sandra Ortiz, según el testimonio del exsubdirector de la UNGRD, Sneyder Pinilla.

Con esta decisión, Nicaragua se convierte en refugio para el exfuncionario más comprometido en el mayor escándalo de corrupción del actual Gobierno. Mientras tanto, Colombia enfrenta un nuevo revés diplomático y jurídico en sus esfuerzos por llevarlo ante la justicia.