Un incidente inesperado sacudió este viernes 7 de marzo el juicio contra el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), acusado de soborno, fraude procesal y soborno en actuación penal, cuando la Fiscalía proyectó un video pornográfico durante una audiencia virtual. El material que formaba parte de los chats de WhatsApp de Juan José Salazar, socio del abogado Diego Cadena, una figura clave en el proceso, y que el ente investigador incluía como prueba, generó sorpresa entre los asistentes antes de que se corrigiera el desliz.

Entre los archivos, además del video porno, también se mostró otro de una persona enana bailando música popular, lo que provocó risas e incomodidad entre los asistentes. Aunque al parecer estos contenidos fueron exhibidos accidentalmente, su presencia en las conversaciones de Salazar forma parte de las pruebas recopiladas, dejando su relevancia bajo análisis. Tras el incidente, la audiencia continuó sin mayores alteraciones, centrándose en las acusaciones contra Uribe.

El juicio, iniciado el jueves pasado, tiene su origen en 2012, cuando Uribe denunció al senador Iván Cepeda por supuesta manipulación de testigos, en el contexto de acusaciones de Cepeda sobre vínculos del exmandatario con el paramilitarismo. Sin embargo, en lugar de encontrar culpable a Cepeda, la Corte Suprema de Justicia halló indicios de que quien habría incurrido en manipulación de testigos era Uribe, y utilizó interceptaciones telefónicas de 2018 como prueba, admitidas por el Tribunal Superior de Bogotá.

En agosto de 2020, Uribe renunció a su escaño senatorial para pasar a la justicia ordinaria, pero la Fiscalía, tras dos intentos fallidos de preclusión rechazados por juzgados y el Tribunal, lo acusó formalmente en 2024.